EL TRIUNFADOR PREPOTENTE

Cada uno tiene un carácter y una actitud diferente para afrontar la vida, en parte se lleva en los genes pero también, en gran medida, se va adquiriendo a través del tiempo, ya sea por educación recibida, por determinadas crcunstancias personales o por propias convicciones.

Hoy quiero hablar del prepotente, a quién no le importa pisar a los demás para conseguir sus propósitos y lograr ser poderoso y superior, es lo que vulgarmente se llama ser un "trepa" (de los que ya os he comentado algo en mi artículo sobre la "fauna social"), y casi siempre suele salirle bien, pues tiene la habilidad de aprovecharse de la buena fe de los demás y de esta manera ascender a escalafones superiores a cualquier precio.

Si, por casualidad tú eres uno de ellos permíteme que te advierta que:

El poder puede comprar compañía pero no amistad, sexo pero no amor, te permie comprar la mejor cama pero no el descanso, pagar a los mejores médicos pero no connseguir tu salud.

Apenas tienes que rendir cuentas, pero no eres libre. La gente ríe tus gracias pero cuando te das la vuelta lo hace de tí. Puedes comprar la mejor música pero nadie te dedicará una bella canción.

Puedes saciar tu estómago, pero tu corazón estará hambriento.

Hablarán mal de tí a tus espaldas, y el día que te mueras, a pesar de que te acompañarán por aquello del "que dirán", cuando hayan visto meter tu cajón en el nicho y vuelvan a sus casas, sacarán a relucir todos tus defectos y pelearán por tu herencia sin ningún respeto hacia tí.

Por eso te aconsejo, sr. todopoderoso, que de momento, mientras puedas, disfrutes de tu paraíso artificial, ue es lo único que tienes.

Y no quiero terminar este artículo sin agradecer a peronajes como este al que me he referido y a otros de comparable calaña, el inspirarme a escribir estas reflexiones y hacerme sentir grande justo y honrado.