martes, 12 de junio de 2012


GABINETE DE ESTETICA
Eufórico y contento se fue D. Mariano a ver el partido de la selección, fue como dijo ante las cámaras, unas horas antes, un día glorioso para España, un día de júbilo para la Europa de la zona Euro, un glorioso alzamiento nacional promovido por las gentes de su partido, que dando fe de su patriotismo propio de nuestra tierra de quijotes y cruzadas supieron colocar una pica, si no esta vez en Flandes, si en Bruselas, dando fuertes puñetazos en la mesa, haciendo ostentación de nuestra credibilidad, fortaleza y valores patrios salvaron la sagrada causa del Euro.
¡Honor y Gloria a nuestros próceres! Ya que ellos han conseguido, según nos han contado, la nada despreciable cifra de cien mil millones de euros a modo de premio gordo de la lotería que no nos va a costar ninguna contrapartida a los ciudadanos ni ninguna intervención de los ávidos mercaderes, que al final no han resultado tales, sino almas caritativas dispuestos a echar unas manos a unos colegas.
¡Todo sea por la banca!, todo sea porque los perros rabiosos a los que tanto tememos como son los mercados, no nos muerdan, ofrezcámosles comida en lugar de resistencia, abrámosles las puertas de nuestras casas y las de nuestras despensas , para que coman, para que así mientras tengan el hocico en el plato no se dediquen a ladrar amenazadoramente en el umbral de nuestro hogar, para que no meen en nuestros muros para marcar su terreno.
Mariano, ¡Cómo has cambiado desde que te has asegurado unas líneas  en los libros de historia como presidente del gobierno de España!, Te ha costado, la verdad, has estado a punto de no conseguirlo, pero bueno, los vientos se tornaron favorables a tus ambiciones, sin costarte ningún esfuerzo, aprovechándote del desgaste de los demás, de una carga (¡ya te llegarán!) que favoreció sin que tú ni siquiera tuvieras que pensar demasiado para llevar a cabo tu ataque feroz, solamente aprovechar las circunstancias, ya que te encontraste, sin soltar tu puro de las manos, sin costarte ningún trabajo (todos sabemos lo poco adicto a esta disciplina que eres), habitando en el Palacio de la Moncloa para tranquilidad de tu rebaño, y para decepción de los que merecen un bienestar social, una calidad de vida y unos derechos y servicios  que costaron siglos conquistar.
¿Recuerdas? (yo si) cuando estabas en la oposición y decías que ibas a hacer un gobierno en la sombra (esa sombra y oscuridad que tanto os complace a ti y a los tuyos), y decías que por aquellos entonces España estaba intervenida y que vuestro partido tenía un proyecto para que no llegáramos a esos extremos (por cierto, proyecto que no vimos ni entonces, ni en la campaña electoral ni ahora…)
¿Recuerdas cuantas veces has dicho que España no necesitaba de ningún rescate ni duro ni blando?
¿Recuerdas que no hace ni una semana decías que de entrada no hacia ninguna falta apoyo de la zona Euro hacia nuestros sagrados bancos y que la última palabra la teníais vosotros?
Buscasteis  chapuceros métodos de ingeniería financiera para intentar maquillar lo que se avecinaba cuando salió la la luz el bloof de Bankia, y al final lo que tenía que ser, bajada de calzoncillos explicaciones veladas por parte de gente de tu gabinete, y, siguiendo con el maquillaje  para disimular en momentos difíciles tu asistencia al partido de la Eurocopa cual si de caceria real en Botswana se tratase, comparecencia breve, fugaz, ante los medios para como en los viejos tiempos, arengar a las multitudes, evitando decir ese “lo siento, no volveré a hacerlo” que tan reciente tenemos, poner a nuestra nación como faro de occidente e intentar darnos una tranquilidad que no sois capaces de ofrecernos con vuestros métodos e ideología.
Aunque me repita, maquillaje, puro maquillaje, estilismo, cosmética política para tapar unas cicatrices que más que disimulo necesitarían de un buen y cualificado equipo de cirujanos plásticos que no se encargara de taparlas y ponerles paños calientes, sino de curarlas de verdad de modo que no volvieran a rebrotar.
Y no nos cabe la menor duda, esos salvadores no sois vosotros, porque además de no evitar el peligro de esas heridas que estamos sufriendo, no sois capaces de enfrentaros a quienes nos las provocan.  

1 comentario:

. dijo...

Que no son gigantes, Javier!!!!
Que no son gigantes, sino molinos!!!
Te veo algo despistado en cierta parte de este artículo.
A ti, como al inhiesto, que no Iniesta, hidalgo caballero, la antipasión que le profesas a Don Mariano te impide ver que sí tenía programa.
Claro que lo tiene!!!
Recurre a eso tan español del donde dije "digo" digo "diego"... y donde antes decía que no, ahora resulta que dije si, o si no lo dije lo digo ahora.
Hagamos un tour por la hemeroteca, revisemos la campaña y ea, ahí lo tenemos...
Tan sólo nos queda revisar la pasada campaña electoral, cambiar los "no" por los "si" y ea, ahí tenemos el oculto cuaderno de bitácora.
Espero que D. Mariano nunca haya fumado del mismo puro que fumaba la casquívana inquilina del tan prontamente olvidado Costa Concordia